¿Piensas que los conflictos son del exterior, y sientes que todo lo que ocurre a nivel social es por culpa del gobierno, de la sociedad, del sistema? En cierta forma esta es una realidad, y a través de los años nos hemos dado cuenta de que la humanidad ha generado conflictos en gran parte por responsabilidad de unos cuantos que están en el poder. Pero de aquí surge un cuestionamiento que quizá no hemos llegado a entender. ¿Si la sociedad está compuesta por personas, y estos niveles sociales se estructuran en jerarquías donde las decisiones no se toman en conjunto, sino desde el punto más alto de esta pirámide?, entonces en realidad en dónde radica el problema. ¿Es en este grupo de poder o es en la sociedad? En realidad en ninguna de las dos. El verdadero problema radica en la desconexión que tenemos cada uno de nosotros, partiendo no de el exterior, sino del interior. No es el conflicto externo al que tenemos que enfocarnos, es en el conflicto interno al que tenemos que prestar atención. Este obviamente es traducido del interior y es reflejado en el exterior. Pero no radica en el exterior. Es una situación obvia que si un líder que no está bien adentro y que además tiene la capacidad y el poder de dar una orden atroz que implica la muerte y la destrucción. Sabremos entonces claramente el resultado que esto causará; un líder persuasivo que envuelve a un pueblo dormido y también desconectado y con un conflicto interno muy grande también, entrando además en un conflicto con otro pueblo dormido, con otro líder dormido. (GUERRA INEVITABLE) Pero entonces nos preguntaremos, ¿qué podemos hacer para cambiar esto? ¡La respuesta está adentro! Empecemos a recuperar las herramientas que nos quitaron y que nos permitían conocer cómo drenar nuestros miedos y sufrimientos, para reconstruirnos desde adentro. Y así de forma automática se reflejará afuera. Este despertar de la conciencia que cada vez es más masivo, trae el estandarte de la transformación. Es el gigante que estaba dormido y que hoy nos ofrece una bandera blanca, no de esperanza ni salvación futura. Viene a cambiar de raíz el momento PRESENTE, desde ADENTRO. Ya no con una revolución, sino con una evolución. Trae el regalo de destruir las estructuras jerárquicas que parten de una pirámide, para hacernos conscientes de que esto debe de partir de una red, una red de personas que están bien desde adentro, que propagan esta vibración ya no hacia arriba, ni hacia abajo. Sino a los lados, hacia ti, hacia mí, hacia todos nuestros hermanos y hermanas. SI QUIERES SALVAR A ALGUIEN, SALVATE A TI MISMO, ¡UNO MENOS QUE SALVAR!
LOS CUATRO PASOS PARA SOLUCIONAR LOS CONFLICTOS SOCIALES
1) ¡Date cuenta! El conflicto no viene de afuera, viene de adentro. De nuestra desconexión con nosotros mismos.
2) En vez de guerrear afuera, ámate adentro. En el amor está la solución. Pero no hablamos necesariamente del amor de pareja. El amor incondicional que viene desde adentro y emana hacia afuera.
3) ¡Medita diario!, eso te da la posibilidad de ver qué está adentro, qué conflictos internos hay en tu mente que no te permiten ver la amorosa esencia de la que estás hecho. La amorosa esencia de Dios.
4) Ten cuidado con el miedo que manejan en los medios de comunicación. Infórmate, pero no te dejes llevar por la histeria colectiva que te presentan los noticieros antes de irte a dormir. Si hay un pueblo en conflicto, ayudemos con tu amor y bendiciones, no con tu miedo y sufrimiento. TODOS ESTAMOS INTERCONECTADOS.
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